Reflexiones sobre la conferencia de Por Qué Servir del 2014: Caressa James
Lo que principalmente creo que aprendí fue que yo no estoy sola cuando digo que a veces lucho. Lucho por equilibrar el trabajo, la escuela y mis obligaciones dentro de la iglesia. Soy un ser humano muy apasionado y a menudo quedo atrapada en la indecisión cuando se trata de lo que realmente quiero hacer y lo que en realidad debería hacer, sobre todo cuando se trata de mi trabajo dentro de la iglesia. Fue refrescante saber que no soy la única persona que lucha con estos temas. Me encanta el trabajo de abogacía, me encanta la salud pública y tengo una gran pasión por la educación, además de ser una sierva de Dios. Poder escuchar a otros y hablar de las luchas y de los problemas con que se enfrentan, realmente me ayudó a poner las cosas en perspectiva. Me dio la claridad que necesitaba para saber que puedo hacer todas estas cosas y mucho más con paciencia, tiempo y diligencia.
Lo que he aprendido me ha ayudado en la programación de mis futuros proyectos. Yo sé que en el futuro trabajaré en la iglesia. Tengo algunos pasos que dar antes de lograr esa meta, pero sé que mi corazón está puesto en trabajar dentro del Ministerio Nativo /Indígena. El ser un modelo positivo entre mi pueblo y la iglesia es algo que me tomo muy en serio. El Por Qué Servir fue para mí otro peldaño a dar en la dirección correcta. Espero que mediante los pasos dados por mi abuela (que fue ordenada recientemente) y los míos, podemos ayudar a que nuestra misión crezca y podemos inspirar a otros a que reciban discernimiento.
Lo destacado que compartiría es el conocer a nueva gente que comparte la misma visión, las oportunidades únicas en los varios ministerios, la oportunidad de hablar con líderes dentro de la iglesia, la oportunidad de aprender sobre otras dinámicas culturales, la oportunidad de hablar libremente acerca de las preocupaciones de la iglesia, y entablar un diálogo.